STEAK TARTAR
lunes, febrero 04, 2013
Impensable hace unos meses que yo trajera esta receta al blog. Y lo era porque a mis años no se me había ocurrido probar la carne cruda, bajo ningún tipo de concepto. Hasta que la curiosidad mató al gato. Hace poco más de un mes tuve la suerte de probarlo en el Restaurante "El Asador" de Salobreña (ya os he hablado en muchas ocasiones de él y de su chef, Paco Izquierdo, que, además es el artífice de Ron El Mondero). Pues lo pidió mi marido por expreso deseo mío, porque me picó la curiosidad, y como no me atreví a pedirlo para mí le dije a él que lo pidiera y así lo probaba yo. Al final me gustó tanto que nos cambiamos el plato. Desde entonces no se me quitó de la cabeza la idea de prepararlo en casa, y, aunque no con la misma receta del "El Asador", sí que he ido buscando varias por la red, y conociendo algo más de este plato que, antes poco interesante para mi, ahora se ha convertido en un plato especial. La receta que más me convenció fue la que al final he hecho, del blog: La sartén por el mango. El chico que la elabora dice que se trata de la receta del Restaurante francés "El comité" de Madrid. Quizás lo que más me atrajo de esta receta era sus ingredientes, aunque dando un paseo por la red, he podido comprobar que los puristas en el tema cada vez intentan añadir menos ingredientes para conseguir que el sabor sea a carne y no a otro tipo de ingredientes. Yo, por mi parte, que lo que intento evitar es que al comer el plato me parezca que estoy comiendo carne cruda, pensé que con estos ingredientes quizás se enmascaraba el sabor a ella, y así es. De hecho, lo que más me ha sorprendido es que Laura, a sus ocho años, siendo siempre tan especial en cuanto a comidas, lo ha probado y dice que le encanta, salvo por los pepinillos que no le hacen mucho chiste. Por lo que, a los que de primeras os tire para atrás comer carne cruda, tengo que decir que seguro que os gusta.
INGREDIENTES (Salen dos platos como el de la foto, yo diría que comen bien cuatro personas con estas cantidades):
- La carne es fundamental y aunque lo suyo es hacerlo con solomillo de ternera, al precio que está es casi imposible llevar a nuestras mesas tan semejante manjar, por lo que también se puede hacer con tapa de ternera, aunque yo en este caso ni eso, me decidí por otro corte de la ternera, como es la babilla , porque era el que tenía en casa. 400 gr. de filetes de babilla de ternera.
- Media cebolla
- 6 pepinillos pequeños
- 1 cucharada de café de alcaparras
- 2 cucharadas soperas de perejil fresco
- 2 yemas de huevo a temperatura ambiente
- 6 cucharadas de aceite de oliva
- Sal
- Pimienta
- 1 cucharada de café de Salsa Perrins
- 2 cucharadas de café de mostaza de Dijon
- Un chorrito de brandy
- Para acompañar:
- Una ensalada con vinagreta de mostaza
- Pan tostado
PREPARACIÓN:
Uno de los pasos más importantes para conseguir el triunfo con este plato es el corte de la carne, éste se hace a cuchillo, nada de usar picadoras, y menos comprarla ya picada. Con esto se evita que la carne quede seca. Hay que echarle paciencia, yo por lo menos ya tenía los filetes cortados, aunque si ponéis la carne de otro corte tendréis que hacer primero los filetes finos y luego ir cortando, con un cuchillo bien afilado, en trocitos pequeños, lo más pequeños posibles. Quitaremos toda los posibles nervios y grasa de la carne, si es que la tuviere. Ponemos la carne en un bol y vamos picando la cebolla, los pepinillos, las alcaparras y el perejil. Añadimos al bol de la carne y mezclamos bien. Tapamos el bol e introducimos en el congelador mientras preparamos el resto de la receta.
Ponemos las dos yemas de huevo en un bol y el aceite, y con unas varillas emulsionamos la crema, cuando esté espumosa, le añadiremos la sal y la pimienta y después añadiremos la mostaza, la salsa Perrins y el brandy, mezclamos todo bien. Sacamos la carne del congelador y añadimos esta mezcla, removemos bien con dos tenedores e introducimos de nuevo en el congelador durante al menos cinco minutos, aunque yo lo deje unos diez minutos más o menos. Después servimos acompañado de una ensalada de vinagreta de mostaza y de unas tostas de pan.
Lo que no sobró lo guardamos en el frigorífico para la noche, y seguía estando igual de bien, no había perdido nada de sabor y textura, por lo que creo que este plato se puede realizar con algo de antelación en caso de invitados, siempre que mantengamos en frío y la carne llegue bien fría a la mesa.
Y con este plato os dejo hasta el miércoles, y os recuerdo que aún queda alguna plaza libre para el taller que voy a impartir el sábado de San Valentín.
Lidia.
23 comentarios
Hola Lidia:
ResponderEliminarComo me ha recordado tu relación con tu marido a la mía, anda que no le he dicho yo veces que pruebe algo el, que yo quería probar y no me atrevía a hacerlo. POr ejemplo, el sushi, o este mismo plato, es que las cosas crudas........... en tu caso con la calidad de esa carne tiene un aspecto buenísimo.
Besicos,
Pues a mí me ha gustado desde siempre la carne cruda, de hecho siempre he pedido el solomillo, la carne en ganeral poco hecha... y el steak tartar me vuelve loca, ahora o lo hago en casa o lo pido en sitios que ya conozco y son de confianza porque no me fío mucho. La receta es buenísima, la probaré. Bs
ResponderEliminarUna exquisitez en casa nos encanta. Te ha quedado con un aspecto fabulosos. Un abrazo, Clara.
ResponderEliminarMi marido es muy aficionado a los tartar, suelo hacerlo de atún pero nunca he hecho el steak tartar así que tomo nota para sorprenderle.
ResponderEliminarUn besito desde Las Palmas y feliz semana.
Bueno, esta es de las mias...que yo soy de carne cruda...!!! Nos sabia que era el Chef del Asador, pensé que era solo el dueño...El Asador es donde cenamos...creo recordar...!!! Bueno Lidia me la pongo en pendientes reduciendo las cantidades hasta que quede un plato para una sola persona...no creo que el resto de la casa colabore...!!! Nosotros hoy tenemos una receta con Ron EL Mondero...de lujo!!!
ResponderEliminarYo opté hace muchos años por dejar de pedir steak tartar en los restaurantes, lo hacía después de pedirlo en uno que fuimos con amigos hace siglos cerca de la calle Hermosilla, no recuerdo ni como se llamaba pero lo que sé es que cerró. Bueno, y no lo pido sobre todo desde que Chicote nos enseña las cocinas de los sitios en La Sexta, :) Pero tengo que reconocer que bien preparado es una auténtica delicia, y que se me ha antojado hacerlo.
ResponderEliminarMe quedo con esta receta que te pasaron porque me parece que puede gustarme mucho.
Un saludo.
Yo tenía mis reparos con esto de comer cosas crudas, pero fue probar el steak tartar en un restaurante ruso (de Madrid, que no me fui a Rusia...) y cambié de idea. Delicioso.
ResponderEliminarHola Lidia, pues estoy igual que los demás... y que tú misma, lo de la carne cruda... umm, hace un par de meses probé la receta del salmon tartar, ¡¡y me encantó!! (la receta de El Comidista, por si te interesa, jejeje). Así que con esta presentación de la tuya voy a animarme también. Ya te contaré qué resulta.
ResponderEliminarUn abrazo, Luz.
Yo era/soy como tú, arrugaba la nariz con esto de la carne cruda hasta que probé un carpacho de ternera y se me cayeron de golpe todos los prejuicios. El steak tartar no lo he probado todavía pero porque no se me ha terciado, la verdad es que le tengo muchas ganas. Y viendo este post creo que no tengo porqué esperar demasiado, lo puedo hacer en casa perfectamente :)
ResponderEliminarOjalá estuviera más cerca para apuntarme a tus talleres... Bss!
Por cierto, atenta al consejo de El Cocinero Fiel sobre el minuto 1:50 :)
ResponderEliminarhttp://elcocinerofiel.com/2013/02/04/hamburguesa-de-pollo-picatucarne/
Pues yo sigo siendo del club de micarnecomounazapatilla, no me atrevo todavía a probar este tipo de platos, me cuesta no cocinar la carne, me pasa lo mismo con el sushi, creo que es una aprensión que tengo. No discuto que la receta se ve estupenda. Felicidades. Besos.
ResponderEliminarLa pinta es fabulosa
ResponderEliminarSe ve muy bueno, pero yo aunque he comido pescado crudo... con la carne no puedo... pero preguntaré a mi marido si le motiva, y se lo haría a él :)
ResponderEliminarbesos
Mmmmm, qué buenísima pinta tiene!!!
ResponderEliminarYo reparo ninguno, más bien al contrario...En mi casa ya sé que ni lo intentarían pero yo me voy a dar un homenaje un día de estos que me apetezca, para mí solita...Bien!!!
me encanta el steak tartar y esa receta tuya esta divina y super bien presentada
ResponderEliminarun beso
No sé Lidia si yo me atrevería, bueno con el aspecto que tiene el tuyo intentaría probar un trozo pequeñito, quizás entonces descubriría que me gusta. Le enseñaré esta receta a mi marido y si él quiere se lo hago y aprovecho para probar.
ResponderEliminarBesos.
La pinta es fantástica, lo probé en un viaje y me gustó, la verdad es que echa un poco para atrás comer carne cruda, pero la combinación de ingredientes es lo que le da el potencial. Un besazo
ResponderEliminara mi me encanta!!! Ahora bien, tienes que tener mucha confianza en el sitio en el que la comes. Yo solo lo hago en restaurantes de confianza y en cuanto puedo... en casa.
ResponderEliminarYo también tengo la receta publicada, aunque lleva algún ingrediente menos que la tuya ;)
Besos. Paula
Despues de haber provado el Ceviche de Dorada que publique hace poco, creo que este plato me gustara, ademas tiene una pinta increible.
ResponderEliminarBesos
Yo que no soy de comer la carne en crudo, con la pinta que tiene este steak tartare!
ResponderEliminarUn besín.
Te ha quedado genial, en casa nos chifla y lo preparo mucho.
ResponderEliminarbesos
que buena receta de steak tartar
ResponderEliminarPor si os puede interesar en nuestro blog hemos analiazado los que creemos que son los mejores steak tartar de Madrid:
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