Existen miles de proyectos que nunca salen a la luz, que quedan en la retina del olvido de aquellos que un día suspiraron por él, pero, en cambio, existen otros que desde que se intuyen, desde que se convierten en sólo un pensamiento ya salen con la palabra éxito como apellido. Y eso es lo que ha pasado con la idea o sueño que tuvo un día Conchi, de Gastroandalusi. Pensando, pensando en crear un juego para compartir y robar recetas de un blog amigo, perfiló un proyecto que ha tenido un éxito rotundo. Al contrario que la mayoría de los retos, que surgen poquito a poquito, tímidamente asomando su cabeza por la red, el reto del asalta blogs ha sido un éxito rotundo de participación en este primer mes, se han creado tantas expectativas que hoy la red esta repleta de asaltadores a la captura del tesoro, ese tesoro que cada uno va a presentar en forma de receta. Cada mes el blog asaltado será uno, el que salga por sorteo entre los blogs asaltadores, en este primer reto el blog asaltado fue elegido por Conchi desde el inicio, ya que aún no había comenzado con el reto, y no fue otro que el de Raúl, de Contigo en la Playa, con el que tuve el gusto de estar también en la playa hace unas semanas, cuando fuimos con Lola a Cartagena, a comer ese extraordinario caldero en Cabo de Palos.
Este verano no estamos teniendo los calores de otros, quizás sea mejor, aunque hay días que parecen más primaverales que veraniegos. Ayer, sin ir más lejos, fuimos a la playa, y ni siquiera nos quitamos la ropa, hacía viento y yo diría que hasta frío...., pero eso no está reñido con lo apetecible que son los helados, con más grados en el termómetro o menos, y si además son caseros pues ya no tenemos excusa. Nunca he probado este helado en las heladerías, siempre os he dicho que soy muy maniática para probar helados fuera de casa, siempre pido los mismos. Pero en casa si tengo a un catador oficial que prueba todo dentro de casa y fuera, y mejor crítico no podía ser. Le ha gustado muchísimo este helado, y a mi me ha sorprendido también muy favorablemente, me ha encantado su sabor, una mezcla de sabores y productos muy cercanos que lo convierten en un helado con personalidad propia, al margen de sus ingredientes. Y eso es lo que pensé yo el año pasado cuando Carlos Dube publicó este helado, me sedujo todo de él, primero el ron, en este caso Pálido, de la vecina Motril, el ron más antiguo de nuestra tierra, las pasas, en este caso sultanas, así como la miel de caña de Frigiliana, de la que os hablaba ya la semana pasada.
Hace unas semanas mi amiga Mª Carmen me regaló una caja de tomates kumato. Enseguida pensé en preparar confitura con ella, y además aprovechando que tenía un magret de pato en el congelador se me ocurrió que podía preparar alguna receta con ambos. Buscando por Internet me salió una receta a la medida, magret de pato con confitura de kumato al P.X. y parmentier, sólo con el nombre salivé, y no tardé mucho en prepararla. El único pero que le pongo a la receta, y que mi experiencia en la cocina, me tenía que haber hecho evitar, era que el magret pasaba primero por la plancha y luego por el horno, con lo que al final me quedó muy hecho, por lo que recomiendo no meterlo en el horno, sino sólo darle vuelta y vuelta a la plancha.
Último lunes del mes y Reto tía Alia, además día de resaca de la noche de San Juan, y como siempre al reto llego el último día. Aunque esta vez me ha venido muy bien hacer la receta el último día, puesto que he aprovechado para introducir una modificación o varias en la receta original aportada en el recetario. Y es que me he permitido la licencia de desviarme de la original para meterle de relleno a estos calamares este "pisto mozárabe". Y el pisto no es otro que la "caponata siciliana" que ya tenía publicada. En Salobreña estamos de fiestas patronales, y una de las actividades programadas era el "Concurso de pisto Sel gourmet", patrocinado por Salobreña Digital. Pese a ser un premio bastante suculento: 200 euros, la participación no fue muy amplia, sólo 8 pistos se presentaron al concurso. Yo no había pensado ni siquiera participar, aunque a última hora pensé que podía hacerlo, el único requisito que exigían al pisto era que constara de 3 ingredientes obligatorios: tomate, cebolla y carne (ésta ultima más propia del "fritillo" que del pisto). Yo no soy muy de pistos, de hecho no los hago con frecuencia, pero pensé que la propuesta de la caponata siciliana podía encajar, así que fue la receta que realicé añadiéndole solomillo de cerdo por cumplir el requisito de los ingredientes. Pensé que arriesgaba, pero no tenía mucho que perder. La sorpresa fue mayúscula cuando presentaron al pisto ganador como el "pisto mozárabe", con el nombre que lo había bautizado el jurado, por lo que ya sabía que se trataba del mío. Y es curioso porque, pese a ser una receta italiana, la procedencia de este plato parece ser que es árabe. Según me contaron después, al jurado le sedujo mucho la idea del contraste de sabores, la pena es que no pudiéramos probar el resto de las propuestas, que seguro que todas serían estupendas.
Son unas cuantas las recetas que tengo publicadas con chirimoya, como el flan de chirimoya, el helado de chirimoya, la mermelada de chirimoya y el coctel de chirimoya, aunque en estas recetas siempre había trabajado con el fruto directamente del chirimoyo: la chirimoya. Desde la Denominación de Origen Protegida de la Chirimoya quieren que podamos preparar este tipo de recetas durante todo el año, por ello comercializan directamente la pulpa de la chirimoya, además de poder usarla durante todo el año, nos evita una cantidad de trabajo enorme, ya que usamos el producto directamente, y no hay que que quitar los huesos a la chirimoya. Este fin de semana en #gastroalmunecar2013 nos han proporcionado desde la Denominación de Origen Protegida de la Chirimoya a cada uno de los asistentes un kilo de pulpa de chirimoya congelada. Ya en la feria hemos tenido oportunidad de probar varias elaboraciones con esta pulpa, todo ello de manos del principal artífice de la I Kedada Gastrobloguera de Almuñécar, Jose el Helaero. José, desde Heladería Daniel de Almúñecar, ha querido prepararnos un estupendo coctel de helado de chirimoya con ron "El Mondero", desde la misma caseta del Consejo Regulador de la chirimoya también nos dieron un estupendo sorbete de chirimoya que nos hizo sofocar los calores del fin de semana. Cuando abres uno de estos paquetes de pulpa de chirimoya no encuentras ninguna diferencia con la misma pulpa sacada directamente del fruto, por lo que debo de entender que en el proceso de envasado y posterior congelación no lleva muchos productos añadidos, y por ello se consigue un producto sano y natural. En casa he usado la mitad de la bolsa para preparar helado, que ya tengo publicado y con la otra mitad he querido preparar esta tarta, que ha surgido de la improvisación, con la que he conseguido conjugar muchos sabores en uno, consiguiendo llegar al mismo corazón de nuestra Costa Tropical, ya que su relleno lleva la misma pulpa de la chirimoya y el ron de Salobreña, "El Mondero", con el que no sorprendió Paco Izquierdo hace unos años y el que no para de conseguir premios de jurados y de crítica.
Seguimos con la resaca bloguera de #gastroalmunecar2013, y mientras voy preparando el reportaje del fin de semana pasado, os voy a traer un plato que probé el el Restaurante El Balate del Pozuelo (Almuñecar), donde hicimos la última comida del fin de semana. Allí está Celia, hija del propietario de toda la vida, que pretende imprimir modernidad a un restaurante a pie de mar, donde habrá que conjugar tradición con innovación, y parece que se le está dando muy bien hacerlo. Entre los platos que nos ofreció el que más me gustó, además del helado de mojito que nos puso de postre, fue una ensalada de aguacate con queso de cabra gratinado, nueces y miel de caña. Ni que decir tiene que la conjugación de ingredientes me pareció fascinante, por lo que no he tardado mucho en prepararlo, aunque decidí darle forma de timbal y no ponerle nueces, sinceramente ésto último me ocurrió porque no me acodé de ellas.
Después de un fin de semana inolvidable en #gastroalmunecar 2013, del que ya os traeré la crónica, empezamos de lunes, y como los lunes son duros, hoy toca una receta sin mayor dificultad, una ensalada de garbanzos con espinacas. Lejos de olvidarnos de los sabores tradicionales del invierno, adaptamos parte del famoso potaje de garbanzos y espinacas a una ensalada. En esta ocasión, el lugar de ponerle bacalao ahumado, que hubiese recordado totalmente al potaje, me decidí por unos langostinos, y junto con un poco de cebolla y pimiento rojo, y un aliño bastante normalito, convirtió esta ensalada en un plato único y refrescante, que para los días de calor que estamos teniendo es una opción muy adecuada.
Voy a tener que abrir en el blog una sección exclusiva para quedadas, como sigamos así......, y es que de un tiempo a esta parte mis escapadas de fin de semana son todas de quedadas entre amigos blogueros. Este fin de semana tocó en Cartagena, Lola Homar siempre ha respondido a la llamada del Sur y cada vez que hemos organizado algo por aquí ella y Pedro han venido, por lo que ahora que le tocaba a ella organizar una en su tierra, no podíamos fallarle, y con el coche lleno de maletas pusimos rumbo a Cartagena......
Este fin de semana hemos tenido gastroquedada en Cartagena, unos días estupendos organizados a la perfección por Lola Homar. En los próximos días os pondré el relato de la quedada, pero mientras no os quería dejar sin receta, pese al cansancio del viaje, y he optado por poneros una bastante sencillita, y que seguro que os gustara preparar para sorprender a los vuestros con con este riquísimo aperitivo. Lo vi en mi libro de tapas y me gustó mucho la combinación de estas gambas frescas, con el toque de azafrán en su rebozado, junto con el alioli, que, pese a ser una bomba calórica, no me puedo resistir a comerlo. Así que estas gambas están para no parar de mojarlas en nuestro alioli.
Como en años anteriores los veranos están plagados de helados en este blog, y con éste se inaugura la temporada. Si tenéis algo de memoria recordaréis que al final del verano pasado se me rompió mi heladera de LIDL, como decía la canción: de tanto usarla, je,je...Total, que el año ha ido pasando y aún no me había planteado comprarme una heladera nueva con compresor, cuando de nuevo salió la de LIDL, y me dije que por 22 euros la compraba, porque me dio muy buenos resultados en años anteriores, mientras me planteo qué heladera con compresor comprarme, compra que haré tarde o temprano, ya que los amigos que ya la tienen hablan maravillas de ella.
El otro día me comprometí a llevar al cole para la comida de final de curso nuggets de pollo caseros. En principio quería hacerlos con formas de animalitos, aunque claro, quise probar antes, para no fracasar a última hora. Al final no pude hacerlos con forma de animalitos, puesto que el relleno blandito no me lo permitió. Así que se quedaron con la forma tradicional de los nuggets, quizás un poco más grandes. A mi personalmente me encantaron, y eso que no como nunca de los comerciales. Así que, con esta receta, os ofrezco la posibilidad de hacer a vuestros niños unos nuggets cien por cien caseros. Estuve buscando recetas de aquí y de allá y luego preparé una versión personal en base a todas las que había visto por la red.
A mi con estos calores (¿serán por mucho tiempo?) sólo me apetece comer ensaladas. Tengo un libro de ensaladas que por estas fechas se convierte en incondicional de mi cocina. De hecho ésta, con algunos cambios ha sido la última elegida para hacer. La original llevaba frambuesas frescas, y yo las he cambiado por arándanos deshidratados, también llevaba ralladura de limón y yo he prescindido de ella, porque ya lleva bastantes ingredientes para aportar un nuevo sabor con la ralladura. El resultado ha sido estupendo, y de todos los ingredientes que le he puesto sólo le quitaría los piñones que creo que no le aportan nada nuevo a la ensalada, en cambio el queso feta, la cebolla picada, los arándanos y los calabacines bien finitos, junto con el cuscús, la albahaca y el aliño dan un sabor realmente refrescante a esta ensalada. Se prepara en muy pocos minutos y podéis reservarla en el frigorífico hasta vuestro uso, por lo que se puede preparar con antelación.
INGREDIENTES (Para dos o tres personas):
- 175 gr. de cuscús
- 300 ml. de caldo de pollo
- 50 gr. de arándanos deshidratados
- 125 gr. de queso feta en cuadrados
- Un calabacín
- Media cebolla o cebolleta
- Piñones (no le aportan nada a la ensalada, la próxima vez no se los pongo)
- Albahaca fresca
- Para el aliño:
- 1 cucharada de vinagre de vino blanco
- 1 cucharada de vinagre balsámico
- 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta
PREPARACIÓN:
Lo primero que haremos será hidratar los arándanos secos, para ello los dejaremos en remojo durante una media hora. Pasado este tiempo los pondremos a escurrir en un colador para que suelten todo el líquido. Ponemos el cuscús en un cuenco grande y lo cubrimos con el caldo de pollo que estará hirviendo. Removemos bien, lo tapamos y dejamos hasta que absorba todo el caldo.
Después pasamos el cuscús a una ensaladera y removemos bien para deshacer los posibles grumos. Añadimos el queso, el calabacín que haremos cortado con la mandolina con un cuchillo muy afilado, la cebolla o cebolleta picadita, los arándanos hidratados y los piñones ligeramente tostados (en caso de que los pongáis). Incorporamos un poco de albahaca picada y mezclamos con cuidado los ingredientes.
Ponemos los ingredientes del aliño en un biberón, salpimentamos y removemos bien. Aliñamos la ensalada con él y servimos. Si nos sobra metemos en un tupper y guardamos en el frigorífico, por la noche estará aún mejor.
Ya sabéis que sigo de concurso hasta el día 29 de junio. No os demoréis en presentar vuestra tarta, que Ibili ofrece un regalo extraordinario al ganador del concurso.
Feliz semana.
Lidia.