TARTA DE MORAS Y MASCARPONE

jueves, septiembre 12, 2019

Hace unas semanas mis amigas de Plain & Simple me regalaron un cubo de moras y ante tan suculento regalo no me podía resistir a preparar un delicioso postre, eso si, después de comerme medio cubo mora a mora, je,je.... Bueno ellas preparan con estas moras una carne de moras espectacular que comercializan y está riquísima tanto en platos dulces como salados. La tarta que he preparado es muy básica, una base de galletas azucaradas, mascarpone, nata y moras en el interior y una cobertura de mermelada de moras.

INGREDIENTES:

Para la base:
150 gr. de galletas tipo Napolitanas
100 gr. de mantequilla derretida
Para la tarta:
500 gr. de moras
500 gr. de queso mascarpone
150 gr. de azúcar glass
300 gr. de nata
7 hojas de gelatina neutra
50 ml. de leche
Para la cobertura:
Mermelada de moras

PREPARACIÓN:

Lo primero que haremos será derretir la mantequilla en el microondas. Trituramos las galletas y mezclamos con la mantequilla. Forramos un molde desmontable de unos 22 cm. de diámetro con papel vegetal en la base. Extendemos la pasta resultante en la base, dejándola uniforme, con la ayuda de una cuchara o un rodillo pequeño. Llevamos al frigorífico mientras preparamos el resto de la tarta.

Ponemos a hidratar las hojas de gelatina en agua fría. Mientras tanto ponemos la nata bien fría a montar, y cuando empiece a coger cuerpo añadimos el queso mascarpone y seguimos batiendo, una vez integrado todo añadimos el azúcar glass y seguimos batiendo.

Mientras tanto lavamos bien las moras y las trituramos. Añadimos a la mezcla de queso y nata e integramos con movimientos envolventes. Sacamos y escurrimos la gelatina y la ponemos en la leche que habremos calentado. Disolvemos completamente ésta y añadimos la mezcla anterior de forma homogénea. Sacamos el molde de la nevera y le añadimos spray desmoldante por las paredes (o ponemos una tira de acetato) y vertemos la mezcla sobre la base de galleta. La mezcla es espesa, por lo que con una espátula o cuchara nivelamos. Introducimos nuevamente el molde en la nevera de un día para otro mejor, o como mínimo unas cuatro horas.